sábado, mayo 29, 2004

Las fotografías de la marcha

Sé que estas no son las mejores fotografías que he tomado. Y que desgraciadamente el rollo se terminó antes de que las cosas se pusieran más violentas (ese desgraciadamente no es apología de la violencia. Pero quien sepa de esto de la fotografía y los momentos únicos me comprenderá). Ilustran parte de lo que fue lo que sucedió ayer. No estoy a favor de la violencia. Sólo fui testigo. Esta fue la otra cumbre...

En la minerva
En la minerva
En la minerva
Durante la marcha
marcha
marcha
marcha
marcha
marcha
marcha
Juárez y 16 de septiembre
Juárez y 16 de septiembre
Juárez y 16 de septiembre
Juárez y 16 de septiembre
Juárez y 16 de septiembre
Los vigías
Juárez y 16 de septiembre
El frente
El frente
V

viernes, mayo 28, 2004

Nuestra propia Ilión

Y ahí estabamos. Carlos Maldonado, Ángel, otro amigo y yo. Ray y Pollo se habían ido. Minutos antes había comenzado el enfrentamiento. Los chavos de la UNAM se habían dejado ir con todo contra los antimotines. Con palos y varillas metálicas comienzan a golpear sus tobillos. Los policías tiene orden de aguantar. Eso no lo dice la televisión horas más tarde. Fotografías y más fotografías. Y entonces se soltaron los demonios. Desde el techo de uno de los puestos de periódicos alguien advirtió que venían más antimotines por Juárez. El grupo del CGH se dividió en dos. Los Anarcopunks que hasta ese momento no habían participado en la batalla comenzaron a marchar hacia atrás. Los unamitas les gritaban que eran culeros por dejarlos solos. ¡Ah! las arengas. Una chica buscaba que todos nos sumaramos a su ataque. La adrenalina en el aire. La tensión latente. Uno y otro ataque rechazados. Y entonces comenzaron a caer. ¡No corran! ¡No corran! El grito que se oía. Retroceder caminando con la policia a la espalda. La esquina de Pedro Moreno perdida. Humo verde. Gas de pimienta en la garganta. Toser. El humo blanco es el lacrimógeno. Llevarse la playera a la nariz. Comprobar que funciona. Ver como alguien toma la bomba y la arroja contra los antimotines. Retroceden bajo su propio fuego. En los balcones han desaparecido los espectadores. Algunos pocos se suman a los muchachos. Gente de traje. ¿Serían inflitrados? Cómo saberlo. EL bloque negro no es de improvisados. Ver como arrancan los botes de basura y los arrojan contra los escudos. Desmontan no sólo los cilindros para basura, también los soportes metálicos, quitan las jardineras, los postes de señalamientos... Todo termina a los pies de los antimotines. Ver como los policías se hacen para atrás y se reagrupan. No más gases. Y entonces se dejan venir corriendo. Los Anarcopunks hasta es momento espectadores levantan sus palos y se defienden. El choque digno de Aquiles y Héctor, de griegos y troyanos. Pero esta tarde los dioses están con los uniformados. Paso a paso van recorriéndo a la gente hacia el sur por 16 de septiembre. Nos pegamos a la pared del Sanborns. Los negocios cerrados. Desbandada general. A 15 metros los uniformados corriendo macana en manos. Correr. Recargarse en la pared. No detenerse. Sacar la cámara. Y apresurarse hasta López Cotilla. Los antimotines se detienen. Los del CGH se reagrupan. Nueva arenga. Para derrocar al gobierno fascista y opresor. Sonrío. En que mundo viven estos chicos. Y entonces. El cristal a mi espalda revienta. Discos Aguilar. Quetzal y los pocos pacífistas que aun quedan repiten a gritos: ¡No violencia! ¡No se vale! ¡Ese no es el plan!. Nadie hace caso. Nuevos golpes al vidrio. por un rato nadie se mete en la tienda. No mientras estamos al lado del cristal roto. Pero entonces los antimotines vuelven al ataque y corremos. Algunos sacan discos. De cualquier manera no son títulos atractivos. Los policías organizados, con refuerzos y sobre todo furiosos (llevan más de dos horas de soportar injurias, golpes en los tobillos, gases, sin poder hacer nada excepto aguantar). Caminamos. Ahora los tenemos a diez metros. Mejor correr. No, correr no porque si corres van a pensar que estas con ellos. Damos vuelta en Madero. Ahi se detienen. Nos miran. Estamos quietos. Alguien ha roto el vidrio de Banorte. Carlos, Ángel y su amigo avanzan hacia 16 de septiembre. Me quedo atrás. Tengo miedo. Realmente tengo miedo. No tiemblo. Ni me siento aterrado. Nada más sé que tengo miedo. Hemos visto como trataron a los que alcanzaron. No lo quiero para mi. Mis amigos han dado vuelta en la esquina. Los alcanzo. La multitud ha desaparecido. Algunos quedaron atrapados en pleno centro. Cercados. Nosotros enfilamos hacia el sur por 16 de septiembre. Los ánimos sorprendenmente parecieran calmados. Apariencias. Retirada. Ellos han ganado la batalla. Se acercan ambulancias. Nos hacemos a un lado. Oscurece. Caminamos hasta avenida La Paz. Compramos agua. Vamos a la oficina de Ángel. En la radio Ricardo Salazar y su equipo de reporteras nos enteran de las últimas noticias. Afuera, por las calles, el estado de sitio. Se escuchan sirenas. Poco a poco la lluvia, ligera pero continua, va regresando todo a su cauce ¿normal?.

jueves, mayo 27, 2004

Imágenes de Pocilga Beat

miércoles, mayo 26, 2004

Blaise Cendrars: "Todo lo que abrazo y amo / Se convierte en cenizas al instante"

"Y entonces, me incendié en la soledad porque escribir es consumirse... La escritura es un incendio que abrasa a un gran torbellino de ideas y que hace relumbrar a las asociaciones de imágenes antes de reducirlas a brasas crepitantes y en cenizas que vuelven a caer... Porque escribir es quemarse vivo, pero es también volver a nacer de esas cenizas." (Blaise Cendrars, L`homme foudroyé, 1945).

"No soy un hombre de encierro... Escribir es lo más opuesto a mi temperamento y sufro como un condenado al estar encerrado entre cuatro paredes y al ennegrecer el papel, cuando, afuera, la vida bulle... Realmente, escribir es, tal vez, abdicar." (Blaise Cendrars, La vie dangereuse, 1938).

"Escribir no es realmente vivir. Simplemente no es vida. Decir que es la vida del espíritu, no vida para el espíritu. La vida del espíritu es la contemplación. ¡Qué gran pena es para nosotros los escritores escribir, y cada día más, una manera de ganarse el pan!... Por lo tanto es un vicio o un mal hábito." (Blaise Cendrars, Blaise Cendrars vous parle, 1945).

"Cada día me doy más cuenta de que siempre he practicado la vida contemplativa. Soy una especie de brahmán a contrapelo, que se contempla en la agitación." (Blaise Cendrars, Une nuit dans la foret, 1945).

"El peligro más grande para un escritor es el de ser víctima de su leyenda y caer en su propia trampa." (Blaise Cendrars, Blaise Cendrars vous parle, 1945).

"El lenguaje es algo que me sedujo. El lenguaje es algo que me pervirtió. El lenguaje es lo que me formó. El lenguaje es lo que me deformó. Por eso soy poeta, probablemente porque soy muy sensible al lenguaje —correcto o incorrecto, me importa un bledo. Ignoro y menosprecio la gramática, ya que está en punto muerto, pero no soy gran lector de diccionarios y si mi ortografía no es muy segura, es porque presto demasiada atención a la pronunciación, esa idiosincracia de la lengua viva. En el principio no fue la palabra, sino la frase, la modulación." (Blaise Cendrars, Blaise Cendrars vous parle, 1945).

"He leído enormemente... Ésa es mi pasión... En otras partes, bajo cualquier circunstancias y toda clase de libros. Devoraba cuanto me caía en las manos... ¡Me drogaba con tinta de imprenta!" (Blaise Cendrars, Blaise Cendrars vous parle, 1945).

"El tema no tiene importancia y tampoco lo pintoresco. No se preocupa uno más que por el poema mismo, es decir por la concordancia de las palabras, de las imágenes y de su llamado mutuo y constante." (Blaise Cendrars, Art poétique, 1922).

"Los últimos resultados de las ciencias precisas, la Guerra Mundial, el concepto de la relatividad, las convulsiones políticas, todo hace prever que nos encaminamos hacia una nueva humanidad y que una raza de hombres nuevos está por nacer. Su lenguaje será el cine." (Blaise Cendrars, A.B.C. du cinéma, 1926).

martes, mayo 25, 2004

La cólera de Aquiles

"Canta, oh musa, la cólera del Pelida Aquiles; cólera funesta que causó infinitos males a los aqueos y precipitó al Orco muchas almas valerosas de héroes, a quienes hizo presa de perros y pasto de aves..." así comienza uno de los libros más importantes y bellos de la humanidad, La Iliada, atribuida a Homero. En la Iliada se narran los combates trabados en el lapso de varios dias entre griegos y troyanos después de nueve años de guerra. Si sólo exisitiera este libro no sabríamos de la caída de Ilión, puesto que en el libro no se narra. La historia termina con los funerales de Héctor el héroe troyano que ha matado Aquiles. Desde que la leí había tenido la ilusión de ver esos combates en el cine. Cuándo a mitad de la trilogía de "El señor de los anillos" me enteré que estaban filmando "Troya", no pude menos que alegrarme, si las grandes batallas de la Tierra Media eran mostradas de manera tan magistral, la gran batalla de dioses y hombres frente a los muros de la legendaria ciudad no podía ser de menor calidad.
     Justo ayer Celeste y yo fuímos a ver "Troya". Y salí del cine hecho una furia. Vaya manera de convertir una gran historia en mierda. El libro salvo excepciones, fue modificado al servicio de un Brad Pitt en el papel de Aquiles que me parece le quedó grande. No me imaginao un Aquiles tan delicado como Pitt. Ni recuerdo un principio tan ni al caso como el de esta película. La gente que jamás tomará el libro en sus manos salé con una idea manoseada del mismo. O ¿qué acaso han aumentado las ventas de La Iliada?. Los dioses brillan por su ausencia, tan importantes ellos, los héroes griegos también, al buen Ayax lo hacen morir con Héctor cuando en el libro jamás sucede esto. Se enfrentan y Ayax lo hace retroceder, pero dónde quedo por ejemplo Diomedes. Agamenon y Menelao son una caricatura. Briseida no es la misma Briseida. Príamo es patético. Ahh y Patrocolo, el pobre de Patroclo no era primo de Aquiles, caray quien es su sano juicio se enoja tanto por la muerte de un primo. Patroclo era el mejor amigo de Ulises, su escudero, veladamente su amante (recordemos que son los tiempos griegos). Aquiles no va solo a pararse frente a la muralla a gritarle a Héctor. Se quedan sólos después de que el ejército de Troya huye a la ciudad y se cierran las puertas.
Para que seguir, para que seguir con esta enumeración de distorsiones y despropositos. Quizá algún día un buen director haga de La Iliada una verdadera obra épica cinematográfica, una película no hecha para el lucimiento de los actores de moda.
     No niego que Troya tiene cosas interesantes, que puede ser una buena película para el domingo. Pero que les puedo decir, para un purista como yo, eso que le hicieron a la momumental obra de Homero, es una aberración, un atentado cultural a la humanidad...

domingo, mayo 23, 2004

Mapas Interiores V

V

v

La trompeta
con sordina. Bajo el agua los soldados.
Han conquistado la ciudad, no más silencio.
Círculos concéntricos. Una red
refractaria, espejos, infinidad de espejos.
En la periferia, donde la humedad apenas
deja rastros, la no palabra
construye de nuevo la muralla.
La trompeta, amordazada bajo el agua, aguarda ante el azoro
de peces invisibles, trasparentes, que se deslizan entre las piernas
sin distingo de credos o naciones
—respirar
los brazos y las piernas extendidas
—suspirar
el agua lame cada recoveco de tu cuerpo, cada hondura
sumergir mis manos, navegar tu fosa más secreta

di
visión

Dos cuerpos, el vacío
Bajo la estela de soldados
cabezas decapitadas por la tensión del agua:
La trompeta
Eres la discreta, la de palabras imposibles
Eres el silencio que construye
(asciende)
la ciudad re-encuentra sus murallas
el agua
envuelve a los conquistadores
círculos concéntricos
en la mirada de sus ojos
la luz ha sido refractada
su peso ahoga cada milímetro de su alma
el peso
de la trompeta que yace silenciosa
ha dejado marcas de sangre en los bordes
las olas y las algas
construyeron también muralla: un arrecife
y tus pies desnudos,
y el viento que ha de juguetear
en un futuro con tu pelo
es mi mano que es mi boca y dibuja el contorno de tus labios
círculos concéntricos
tu cuerpo refleja la luz y la hipnotiza
La ciudad ha construido su muralla (nueva)
¡oh musa!
y asesina a los que osaron destruirla.

La trompeta expulsada ha sido
para recomenzar la historia


círculos concéntricos, ondas, luz
la muralla en pie (una vez más)
tú en oración
la trompeta

Mapas Interiores IV

IV
NOTA: Estos poemas, originalmente agrupados bajo el título de Paisajes interiores —pero que cambiaron después de una plática con la pintora Sandra Carvajal, quien los bautizó con un mejor nombre: Mapas interiores—, nacieron de la contemplación de una serie conformada por nueve fotografías, las cuales tomé una de las noches de "Puertas Abiertas", durante un performance realizado por Laura Covarrubias y una amiga (cuyo nombre no recuerdo), en la azotea de la casa-taller de Daniel Neufeld. Sin embargo, son tan sólo el detonador: un punto de confluencia, una pista de despegue. Lector atento, podrás darte cuenta que lo que se dice en ellos poco o nada tiene que ver con las imágenes. La más de las veces el poeta tampoco sabe a donde habrán de conducirle sus palabras. Finalmente todo poema es un ensayo...

P.S. Algunos de los poemas anteriores los he ido corrigiendo y actualizando su versión en línea conforme a su propio proceso de madurez.

IV

El silencio ha construido un muro y rodea tu cuerpo.
La muralla cae azotada por el brio de una trompeta
furiosas olas
Tu cuerpo se derrumba junto a un muro blanco
tus ojos en la caída de la luz al agua.
Círculos concéntricos.
Cerrar los brazos
la luz se refracta:
el silencio ha perdido la batalla.
(Los soldados toman el sol indiferentes
sus armas se han perdido en las cavidades de la historia)

Una espalda, un cuerpo, la alberca en la distancia
setenta y siete veces había sido negado el clamor de la victoria a esos generales
La ciudad cayó, la trompeta yace ahora rotegida.
Círculos concéntricos.
En vuelo rasante un cuervo de mirada torva
enceguecido
cae y colisiona contra el agua
se rasga el velo, las leyes físicas se han distendido
espejo
turbio. La memoria
olvidada de la arena
luz jugueteando en las paredes.
Sumergirse
llegar hasta el fondo de la fosa envuelto en el no sueño:
La mirada de un ejercito en su gloria.
Dentro del agua
un corazón resiente el frío de las profundidades

Es ésta la visión del dios
(células acuosas), y tú has entrado a su mirada.


Te miras
distorsionada en ese cielo.
Manos juntas. (Asciendes).
El sonido se introduce en ti. (Asciendes). En oración
tu cuerpo es recorrido por el agua.
En lo alto te encuentras a ti misma, te contemplas:
estiras las manos: tú y tu reflejo
al juntarse
rompen
la creación del dios.

------------------------> ya saben, en el blog, los espacios y sangrías desaparecen o bien da mucho trabajo acomodarlos.

viernes, mayo 21, 2004

La Pocilga Beat (parte II... Maten a Beat...)

El za za za mezclado con Acid Cabaret
o un nuevo soundtrack
para el Santo y Blue Demon
contra los monstruos


Perdidos en el periférico
o de como el estudiar marketing
llevó a la Niña Honguito
a la creación de un martini
en cantidades industriales

Massive Atack sonaba en las bocinas del auto. Eran las cuatro de la madrugada cuando conducía mi auto a lo largo de una solitaria avenida Patria rumbo al departamento de Lu. Recuerdo que iba hipnotizado por las líneas blancas del pavimento tratando de no zigzaguear por el camino. Que mi mente viajaba hacia las pasadas horas, al mismo auto, escuchando el mismo disco, con Lu también a mi lado pero no en avenida Patria sino sobre el periférico, tratando de interpretar de manera correcta las indicaciones de un borroso mapa, con la finalidad de llegar a la fiesta electrónica de la Niña Honguito.Tomamos el Periférico en Mariano Otero, de inmediato cargué el auto al carril derecho para irnos lentamente tratando de ubicar alguno de los edificios bocetados en el mapa. No hubo éxito. Llegamos hasta el puente de avenida Guadalupe y entonces supimos que nos habíamos pasado. Regresamos. Y ahí vamos de nuevo rumbo a Mariano Otero pero ahora por el otro carril. Y entonces, de reojo, apenas una fracción de segundos, me pareció ubicar uno de los puntos de referencia, el pie a fondo en el freno, amarre, y la pobre de Lu que si no fuera por el cinturón hubiera salido por el parabrisas. Unos metros en reversa y meternos a la boca del lobo, una calle oscura de una colonia desconocida. La misión encontrar una calle con el extraño nombre de "Tuya". No me extenderé en las idas y venidas que tuvimos que dar, al final logramos llegar a la fiesta. Lu había comprado un six en el camino, así que antes de cruzar el umbral rumbo a la fiesta electrónica nos despachamos las primeras latas de muchas más que se cruzarían en nuestro camino.
     La Niña Honguito se encontraba al final de un larga terraza atestada de veintiañeros fashion. Sus primeras palabras después de los abrazos fueron que ya estaba ebria pero feliz. Un DJ, muy bueno por cierto, cuyo nombre he olvidado, ambientaba el lugar, algunos de los amigos que la cumpleañera nos había presentado el día anterior se acercaron a nosotros para comentar que la fiesta del Ray les había encantado. Ahh es que esas son fiestas. Y entonces sucedió. La Niña Honguito con un par de vasos de plástico rebozantes de un líquido rojo y espumeante. Tomen para que se pongan a tono. La bebida estaba fría y dulce. De inmediato identique el vodka inconfundible y un extraño sabor a Kool Aid. Días después Honguito me aclararía la receta: vodka, ron, vino tinto, principalmente lo demás, lo he olvidado. Lo curioso de esta bebida es que se había preparado en cantidades industriales. Un par de garrafones de veinte litros guardaban aquel preciado martini. Nos quedamos poco tiempo. La fiesta de Aldo esperaba, además de varios amigos ansiosos por entrar ya que los boletos los tenía Lu.
     La casa de Aldo esta en Zapopan, en el fraccionamiento Altamira. Meses atrás habíamos ido a su casa a echarnos un palomazo. En aquella ocasión ibamos el Comandante Jiménez, Lili (que ya sabemos es su esposa), Inés, Lunorman y Laura Covarrubias. Recuerdo que a cada uno de los presentes le tocó cantar, mejor dicho berrear algún cover. "Entre dos tierras" de los Héroes del Silencio fue la canción que terminé convirtiendo en una sonora mierda. La cantada no es lo mio. Pues he ahí la Pocilga Beat. Ingresar fue fácil, y para nuestra sorpresa no había la inmensa cola esperando la llegada de los boletos. Ingresabamos a una terraza de medianas proporciones con bastante gente a esa hora, poco más de medianoche. En la pared se proyectaban fotografías e imágenes de Aldo y sus amigos en diferentes ciudades del mundo. Favor de recordar esta pantalla es importante. Para sorpresa nos topamos con todo el honorable equipo de El Cuadrilatero, el taller del pintor Carlos Maldonado. Por supuesto Carlos, Adrián, Carlos pepón, el agregado cultural, es decir El Pollo (Antonio Gallo) y la ausencia de Ray, por motivos de salud. Minutos después una vibración en el celular de Lu nos avisaría de la llegada del Comandante Jiménez, Lili y anexos. Los anexos por supuesto eran los amigos rockers del Comandante con quienes habían ido al concierto del recuerdo: Cuca en la concha acústica.
La música en ese momento de lo mejor, un poco del acid cabaret de Shock Bukara, Sussie Quatro, Fat Naked Lady... y entonces comenzó a escucharse el inconfundible za za za... mezclándose con los beats electronicosos. No paso del za za za, afortunadamente pero fue una mezcla verdaderamente extraña y divertida. Y entonces comenzó la película. Narim Narim Narim... El santo, Blue Demon contra los monstruos. El mero surrealismo. Za za za. Nopal Beat. El auto deportivo de El Santo, el azul de Blue Demon, Drácula, Frankestein trás ellos. Las chicas guapas de la película. Algunos afortunados que al entrar recibieron de obsequio un luchador. Ya de por si entonado con el Martini industrial, las modelos que caían en mi mano sin saber con certeza de donde. Los cacahuates enchilados. Más cerveza. Barra libre. Tequila y Vodka. ¿Cómo diantes no cai?. Y luego la etapa rock. Ingrata de café Tacuba, el slam, Maldonado, Lu, el Comandante, guerra sin cuartel todos contra todos. Un cuadrilatero. Pero todo debe terminar. Adios al santo. Comenzó a proyectarse en la pared Trainspotting. La fiesta inció sus estertores finales. La gente saliendo. Hasta que alrededor de las 4 concluyó.
     Por eso ahora voy por Avenida Patria, rumbo a Cruz del sur, para llevar a Lu a su casa. Por eso llegaremos y me invitará a bajar. Y nos sentaremos en su sala. Y sacará la pipa. Y fumaremos de ese tábaco mágico que guarda. Y de pronto las palabras se perderan en un fade out misterioso que además se robará la luz. Y cuando los abro son las nueve de la mañana del día siguiente y sigo sentado en la sala...

martes, mayo 18, 2004

La Pocilga Beat

Crónica de una noche de fiesta con preámbulo
o de como escapar de la policía leyendo poesía
(la rima, por supuesto es intencional)


Preámbulo
Esaú nos dejó justo enfrente del Chai. Tendí mi mano a Lunorman, que venía en la parte trasera del auto, para ayudarle a bajar. Se suponía que Laura nos estaría esperando en el café, pero cuando escapamos de los pesados rayos solares y nos envolvió la frescura del lugar, una casa antigua con techos altos y gruesos muros pintados de blanco, nos percatamos que nuestra querida amiga no había llegado. Cruzamos una mirada complice: de seguro nos esperaba una larga espera.
     Decidimos sentarnos en la terraza del lugar y pedir un par de cervezas que se convirtieron en cuatro, dos por uno nos dijo el mesero. Y Ahí estabamos, después de dos semanas de no vernos, y un viaje a Monterrey por parte de ella de por medio, nos soltamos hablando de las grandes avenidas, del parque fundidora, de Cintermex, del Marco, de las encrucijadas y de la toma de decisiones en la vida de cada uno.
     El hambre comenzó a hacer mella en nuestros estómagos. Laura sin aparecer. Lu decidió marcarle. Aún en su oficina, pero a punto de escapar, segun dijo, para unirse a nosotros. Justo al colgar una nueva llamada. Gaby Bautista, subdirectora de Radio Universidad, anunciando que no nos acompañaría. Qué mas da, otro par de cervezas.
     Al fin aparecio Laura. Como siempre hiperactiva, con cara de aquí no ocurre nada, todo esta cool. Y los meseros que nunca están cerca de la mesa cuando uno finalmente los necesita. La hora del 2 x 1 había pasado, así que la idea inical, aprovechar la promoción para comer sin gastar tanto, se esfumó. Ordené, contra mi costumbre, un platillo del cual no tenía la menor idea de qué era. En la carta se leía que un Panini de pollo era nada menos que una combinación de pollo frito con pasta y queso crema en una baguette. Sorprendentemente me gustó.
     Sobremesa: mucha actividad para el fin de semana. Cumpleaños de la Niña Honguito en La Santa, Cumpleaños del Rai, por lo tanto fiesta en el ya celebre edificio de Avenida La Paz y Enrique Díaz de León, punto de encuentro obligado en Guadalajara. El sábado segunda fiesta de la Niña Honguito, a los pies del cerro del Colli, y fiesta de Aldo en la Pocilga Beat, para entrar sólo con invitación y Norma tenía varias de ellas. En fin que mientras intentabamos resolver nuestras respectivas vidas, ja, también decidiamos como gastarlas.
     Hora de partir, Lunorman y Laura se fueron juntas, por mi parte tomé avenida Juárez rumbo al centro de la ciudad...

     —Que el padre de tu novia sea un escritor es de caché
     —No te compliques, es más de caché que el escritor sea tu amante...


La lectura y La Santa
Plaza Universidad, frente a la biblioteca iberoamericana, la lectura de Jazmín, Lucero Alanís de Gurrola y Françoise Roy había comenzado hacia ya un rato cuando desde mi punto de observación, distinguí a lo lejos la inconfundible figura del Comandante Jiménez acompañado, por supuesto, de su linda esposa. Ya Lunorman me había advertido de la posibilidad de que el Comandante aceptara acompañarnos a la fiesta de la Niña Honguito, sin embargo hasta no ver, creer, como digo siempre. Concluida la lectura, me acerqué al Comandante y a Lili para preguntarles si nos acompañarían a La Santa. Dudaron unos instantes, pero una botella de Santa Helena blanco terminó de convencerlos de caerle a mi casa.
     Bajo las primeras y frías gotas de alcohol, mientras el aire se colaba por la ventana que da hacía lo que años antes era avenida Lafayette, comenzamos a platicar sobre la ciuad y su pasado. Sobre los edificios que ahora ocupan los espacios de recuerdos borrosos, casi leyendas. ¿Alguién recuerda, por ejemplo, qué había antes del Centro Magno?... Una plaza, llamada Plaza Vallarta, donde, les contaba a mi par de amigos, había un cine que a su vez es mi primer recuerdo de un cine, y de una película, que una de mis tías me llevó a ver: El retorno del Jedi.
     A las 10:30 encaminé el rumbo a casa de Lu. Morelos-Chapultepec-Glorieta Niños Héroes-Mariano Otero-Arcos del Milenio-Expo Guadalajara (Aquí debí tomar la lateral pero no lo hice)-Plaza del Sol-Plaza Milenio-Lopez Mateos-Avenida Conchitas-Cruz del Sur (La penca, santuario del alcohol para navegantes nocturnos)-Isla Raza-Isla Timor-departamento.
     Como respuesta al timbre escuchamos un maullido (¿Sofía?, ¿Ego?) y la voz de Lu avisándo que en un momento abría. Puerta abierta. Lu radiante. Feromonas en el aire. Temblor de labios. Ceci dormida por lo que no le pude entregar personalmente los cuatro nuevos libros de la editorial. Unos momentos más para ponerse a punto. (Y los que saben, sabrán a que me refiero) y la partida.
     Isla Timor-Isla raza-Un oxxo (donde no encontramos Modelo Light)-vuelta en una avenida no conocida-otro oxxo (ni modo, Tecate, ya resignados)-Avenida de las Rosas-Mariano Otero (de nuevo Arcos del Milenio, glorieta niños Héroes)-Américas-Marsella-Guadalupe Zuno.
     El auto detenido en la esquina, los gritos de Bjork en su etapa sugar cubes inspirando al Comandante, que para los que no lo saben, aparte de su oscuro trabajo como detective urbano, su voz es una de las más reconocidas en la escena rockera tapatía. "Puppets" se escuchaba en las bocinas, mientras el Comandante sacaba su cuaderno y tomaba notas de una idea para una canción, a su vez que los demás rolabamos las Tecate. Distraer al Comandante en pleno arrebato místico por lo general le puede costar a uno la vida, sin embargo la torreta bicolor de una patrulla nos convenció de esperar unos momentos para continuar con el brindis, lo que nos salvo la vida, porque gracias a eso, la poesía, la lírica de nuestro cantante-detective fluyó sin interrupciones. Punto final justo cuando la patrulla se detenía a nuestro lado y desde adentro un par de policías nos atosigaban con una potente lámpara en busca de no tenemos idea de qué... De pronto apagaron la lámpara. Habían reconocido al buen Jiménez, cuya privilegiada posición de autoridad nos había salvado, una vez más, de terminar el fin de semana encerrados. A estos pobres hombres no tuvieron nada más que hacer que esbozar una tartamudeante disculpa...
     —Disculpe mi comandante
     —No sabíamos que era usté
     —De haber sabido... pos ni lo molestamos
     —Edá que si!...
     La mirada torva de Jiménez los convenció que lo mejor era partir. Dicho y hecho, en un santiamén la patrulla desapareció en la oscuridad, camaleón nocturno. ¿Pero a nosotros quien nos salvaría de la furia poética del Comandante? Tú eres el editor, así que lee mi canción y dime que piensas. Sudaba. Afortunadamente el buen Jiménez, a pesar de todo y digan lo que digan, es un buen letrista. ¡Salud!. Y ahi murio un Six de Tecates
     La Santa no es un antro muy grande, de hecho es más bien, como la mayoría de los antros de esta zona, una casa adaptada para... Lo que serían la sala, el comedor y la terraza eran un largo pasillo repleto de mesas y con ya bastante gente. Al fondo, donde alguna vez leyera mis textos en un toquín de los buenos Restos, Troquer hacía vibrar los muros con su jazz. Y entonces el deslumbramiento. La Niña Honguito, la querida Niña Honguito, la cumpleañera, de zapatos y faldita corta blanca, de playera negra y pelo recogido. Sonriendo. Lu fue la primera en saludarla, después el Comandante y Lili. Mi turno. Volver a sentir ese cuerpo entre mis brazos. Caer en precipicio de recuerdos. Te ves hermosa, le dije al oído, tus ojos me encantan. Te extrañé. Terminamos sentados en la mesa principal, como gente importante, con los pies bailando al ritmo de la sincopa y aplaudiendo el talento de los Troquer. Un poco más de alcohol. Lu al celular con Laura. Apenas en su casa a punto de bañarse. El tiempo vuela. De pronto Laura ya estaba con nosotros. Saludando a medio mundo, ustedes comprenden, siempre hay alguien más sociable que todos juntos. Martinis para todos. Honguito nos presentó a sus amigos. Hola que tal mucho gusto. Recuerdo de esa noche a su mejor amiga, chica con una de las sonrisas más francas que he visto en años. Hora de caerle al Rai. Anunció Laura volviendo de su gira saludadora. Ni hablar. Tan a gusto que yo estaba. Le pasamos a la Niña Honguito la dirección del edificio más famoso de la ciudad e hicimos que prometiera alcanzarnos. Lo prometió. Pero ya saben, soy hombre de poca fe. Lu se fue en el auto de Laura, para que no estuviera tan solita. El Comandante, Lili y yo en mi auto. Para mi sorpresa logré echarlo andar, bajar el vidrio, y encender la radio al mismo tiempo sin problemas. El traslado no duró ni cinco Minutos. Guadalupe Zuno-Montenegro-Escorza-La Paz esquina Enrique Diaz de León. Auto detenido.
     Llegamos justo en el apogeo de la fiesta. La puerta del edificio abierta, gente entrando, parejas saliendo, la música hasta nuestros oídos. Departamento uno. Casa de Rai y Pollo. Gente en las escaleras. Otros de pie caminando. Entrar al departamento. Perderse en el mar de gente. Aspirar el inconfundible aroma. Buscar, buscar a los conocidos. Toparnos con el buen Adrián, famoso locutor de Radiarte, amable Gerente de un billar en pleno centro y una de las personas más amigables que conozco, ni se diga del gran aprecio que le tiene la banda por su gran colección, que parece inagotable, de discos compactos y por su secreta facilidad de conseguir colar a sus amigos a los mejores conciertos de la ciudad. Jimenez y Adrián, viejos conocidos, se saludaron con mucho afecto. Le pregunté por el pintor Carlos Maldonado. En su taller. Es decir en el depto cinco de este edificio. No tardo en sumarse a la fiesta. Lu y Laura llegaron con una buena dotación de Cervezas. Saludos por aquí y por allá. Fiesta total.
     Hay momentos fantásticos, irrepetibles, epifanías. Adrián tiene el suyo, nos cuenta, está feliz de que proximamente será padre. Le cuenta al Comandante y a Lili. El Comandante quería un pase para ir a ver el concierto de QK. Demasiado tarde. Ahora si que las influencias no puedieron ayudarlo. Ahh si me hubieras dicho antes, con mucho gusto. Y entonces, vino la mía: extraño privilegio de tener en una noche, dos epifanías. Su faldita blanca, su playera negra, sus ojos. ¡La Niña Honguito, había llegado!.
     Sé que la fiesta siguió, recuerdo que bailé, que todos bailaban, que en algún momento bajamos las escaleras del edificio con rumbo a un teléfono público tomados de la mano, y supe que por instantes como esos, la vida vale la pena. La felicidad es tan misteriosa. Tan incomprensible. Pasé el resto de la noche a su lado. Cerca como nunca. Ahh que fiesta. Hasta que la Cenicienta tuvo que regresar, y como su casa quedaba cerca de la residencia de mi amigo detective y su linda esposa, tuvimos que avisar a los amigos que quedaban de nuestra partida. Creo que ni Laura ni Lu lo lamentaron, ellas tenían ya su fiesta.
     La Paz-Enrique Díaz de León-López Cotilla-Federalismo-Fidel Velazquez-Colonia Guadalupana.
     Las despedidas no son mi fuerte. Sólo sé que en casos como este no las deseo. Pero ni hablar la vida sigue... Ahh Nniña Honguito... ojalá, ojalá, ojalá...
----------------------------------------------------------------------------------> CCV
(To be continued....)

lunes, mayo 17, 2004

Fotos que tomó Blás Roldán de nuestro stand en la feria

En la Feria Municipal del Libro de Guadalajara

En la Feria Municipal del Libro de Guadalajara

jueves, mayo 13, 2004

Escuchando a...

1. Röyksopp-So Easy
2. Laurent Garnier-The Force
3. Julieta Venegas-La Flor
4. The cure-Lovesong(extended)
5. Leonard Cohen-You Have Loved Enough
... y por azares de la tecnología, aquí se trabó el CD

miércoles, mayo 12, 2004

Una suma de peticiones y anexos

Ahora que empiezo a escribir esto no se por donde comenzar. Pero ya lo sé. Comentar sobre lo que se publico en el "Dia siete" el domingo pasado: Los 100 narradores mexicanos más importantes. Jactarme de que dos de ellos están en el Consejo de "La Voz de la Esfinge" y que Rafael Medina es autor de nuestro catálogo, y además Best Seller. Algunos de esos autores también están linkados en el blog, como es el caso de Tryno Maldonado, Fadanelli, Chimal. Aprovecho para comentar brevemente sobre un libro de Joaquín Mortiz, "Nuevas voces de la narrativa mexicana". La mayoría de los autores contenidos en esas páginas nacieron en algún momento de la decada de los setenta. Muchos que no conocía, otros sí. Como en toda antología hay textos que me gustan más que otros, entre los autores que recomendaría seguir la pista están los siguientes: Nicolás Cabral, Alberto Chimal, Bernardo Fernández (que ádemás es monero y diseñador gráfico), Julieta García González, Pepe Rojo, Tryno Maldonado, Julian Herbert, Fernando de León, Will Rodríguez, Socorro Venegas, Heriberto Yepez...
*
Sobre lo del sábado seré breve. Nos invitaron a hablar (a los escritores que menciona la nota de Mural) sobre nuestra experiencia con los jóvenes. En primera me sorpendió porque no considero tener una gran experiencia, más que nada porque la diferencia de edad entre los asistentes al congreso y este escribidor a lo mucho sería de cinco años, pero en muchos caso de mucho menos. Así que tanto Jorge Orendáin como Karla Sandomingo, que si han impartido talleres y ya tiene un poco más de recorrido hablaron sobre esto. Jorge fue muy puntual con sus comentarios y además leyo un texto que le sirvió para los mismos. Karla improvisó la mayor parte del tiempo y parecía que había olvidado que había gente de ciudades distantes a la nuestra. Efraín Amador habló de su experiencia en prepa 7. Se cito a un tal Pierre Bordieu (espero haberlo escrito de manera correcta, pues no lo he leído) y se hablo de como por tendencia casi natural el ser humano se va conformando en grupos similares y que en el caso de la literatura estos grupos buscan una especie de poder en el cual el estilo detentado por el grupo sería el válido, claro hasta que este grupo se divida y así sucesivamente. Me aburre cuando los estudiantes se sienten eruditos y comienzan a citar libros y libros... creo que de pronto ese tipo de cosas matan la literatura. Además, comentaba, no todos esos estudiantes tendrán que llegar a ser forzozamente escritores. En general creo que afalta humildad para trabajar en la literatura. Ahora todas las cosas pareciera que se dan fáciles. No me quedé a las lecturas de los jóvenes escritores, tenía que estar en la Feria Municipal del libro. He leído comentarios de como estuvo. Nada trascendental supongo. Por cierto un par de unamitas se alojaron en mi casa, fui un amable guía de turistas y creo que no decepcioné a los invitados.
*
Invito a mis amigos a que lean mi blog, a que me dejen mensajes, a que se sientan parte de esto. A Laura Covarrubias le dije que la mencionaría en alguno de mis comentarios. En esta caso la mención se debe a que ella aparece en las fotos que acompañan los poemas. Son fotografías de un "performance" en el que ella y una amiga bailaban y tras ellas se proyectaban diapositivas de distintos lugares. Como la danza fue en la noche, tuve que comprar un rollo de una altísima sensibilidad (3600) y bueno el resultado lo podrán ir observando conforme vaya escribiendo los textos. Los textos en realidad no tiene que ver tanto con las imágenes, son meros pretextos.
*
Otro amigo del que hablaré en esta ocasión es Efrén Jimenez, ex-vocalista de un grupo del cual me jacto de ser fan y que por desgracia ha desaparecido: Restos. Me platicaba ayer que ya anda nuevamente en un proyecto musical y eso le emociona. Espero que pronto se le pueda ver de nuevo tras un microfono, me gusta su voz, sus letras, tiene fuerza en el escenario. Por si quieren más datos de él, también es monero (y bueno), todos los días se publica su cartón en "El Occidental" y cada semana una tira en "La Gaceta Universitaria". Por cierto que en esa plática me decía que notaba que a mis textos les faltaba fuerza. Fuerza es un concepto medio extraño. Y tampoco le gusto el nuevo formato del blog. Pero a mi sí. Para finalizar, como en la radio, aprovecho para mandarle un saludo, pues espero que sea uno de mis lectores, y a ver si se anima a dejar algunas líneas.
*
De los hula-hulas me he negado a hablar. Me parece que eso de urbanizarte es un tomadura de pelo. Sí, será muy juguetón y lo que quieran pero no es arte. Tampoco me parece un acto de censura que ameritara el debate o seudodebate que algunos artistas y uno de los periódicos locales han fomentado, no creo que firmar un papel a manera de carta de recomendación para Frank sirva de mucho. Muchos le advirtieron que estaba cargando la mano hacía un sólo grupo y creo que parte de eso fue lo que lo que provocó la decisión de la Tía Chofi. Su trabajo fue bueno, tenía buenas ideas, y su salida frustó un proyecto que teníamos en ciernes. En fin. Lo que ahora queda es saber el destino de "Parque Nandino", la revista comandada por León Plascencia Ñol y Luis Fernando Ortega, con fondos de nuestros impuestos, que me parecía interesante a pesar de su inclinada balanza. En fin, la política por arriba del arte. Como siempre...
*
Una última nota: Las versiones de textos que se pueden leer aqúí no son por supuesto las versiones depuradas de los mismos. Es más el afán por compartirlos que la finalidad de la presunción. Tienen fallas, pero bueno la función es poder verlos un poco a la distancia para detectar mejor sus fallas. Sí, me curo en salud. Hasta la proxima...
*
P.S.
A la niña honguito un saludo con mucho cariño por su próximo cumple...

lunes, mayo 10, 2004

Notas mientras trabajo en la portada del libro de José Antonio Neri

I
Los últimos días han sido agitados. Más que una agitación física una agitación mental. Pasar varias horas del día sentado en una silla intentando vender libros mientras la gente pasa sin detenerse siquiera a hojearlos produce que el tiempo se utilice en reflexiones. Pero reflexionar no es sinónimo de entender las cosas, o de sesudas meditaciones sobre los temas más profundos del ser humano. En todo caso es asumir los pasos en falso que uno ha venido dando en los últimos meses. Asumir los errores en la toma de decisiones y afrontarlos. Apartar lo que enveneno nuestra vista y llorar las suficientes lágrimas por lo perdido. Detener entonces el llanto y suponer que más tesoros habrán de encontrarse en el camino.

II
No obstante, la desorganizada feria municipal del libro no ha dejado sólo meditaciones, también nuevos amigos, o mejor dicho amigas: Claudia, Lissi, Ana Claudia. Las tres cercanas al poeta Luis Armenta, alumnas de su taller, pero que el tiempo compartido bajo la sombra del stand nos ha permitido estrechar lazos literarios y amistosos.

III
Satisfacción de algún modo. La revista se vende. Lentamente. Al menos una diaria. Los libros de manera más lenta. Nos urge una verdadera asesoría en mercadotecnia, promocionar a nuestros autores, saber que tipo de lectura la gente se animaría a comprar, quizá cambiar el diseño de las portadas, o simplemente mejorarlo, o editar un libro verdaderamente comercial que sustente lo demás, etc... Ideas sobra, el problema, como siempre es llevarlas a cabo.

IV
Un suspiro de insatisfacción. Después de seis años apenas tratando de arreglar los asuntos de la titulación. Hace seis años la vida parecía prometerlo casi todo. Últimos semestres de la carrera, "Antes de estar" publicado a nivel nacional en Tierra Adentro, comienzos de "La Voz de la Esfinge" como tríptico literario, esbozos de la editorial con Hilda Figueroa, una pareja por la cuál luchar, algo de fama... ¿Qué sucedió entonces? Ni yo mismo lo sé. Hay éxitos por supuesto, pero de mi como autor casi nadie sabe salvo la gente más cercana. Dicotomia: nunca me preocupe por lo que los políticos procuran hacer todo el tiempo: salir en la foto. Silencio. No publicar nuevo libro, no establecer lazos con otros escritores contemporáneos, dejar que las cosas fluyeran. Ahora caigo en cuenta que quizá eso fue un error. Ahora que leo antologías, tanto de narrativa y poesía, autores que conozco, que leo algunos con más gusto que otros, comparo mis textos y descubro que no estoy ni más lejos ni más cerca de ellos. Pienso en que basta de silencio. Sin embargo sucede lo mismo que con la Tesis. Seis años después los asuntos se complican, hay que buscar en los archivos calificaciones olvidadas, pagar adeudos, hacer que los engranes reaccionen. En literatura, luchar contra el grupo en el poder o integrarse, coquetear y mantener la independencia. Ahh el arte, es un juego de poder. Y en el fondo sigo tan ingenuo como siempre.

domingo, mayo 09, 2004

Paisajes Interiores

III

III
Una playa
una larga playa donde alguna vez
la frágil transparencia del océano
la síncopa de las olas al romper en la estridencia de la costa

La bahía
una extensa franja de tierra a la distancia
una cumbre cercenada del azul de un cielo despejado
Aquí y ahora
no es lo mismo que entonces
que tal vez
que en esas fechas

En la playa
un balón que rueda sobre cristales de arena y se
despeña
Jóvenes a toda prisa en su persecusión
"insensatos", piensa el que dibuja
la mano de los dioses
que pretende manejarlos sin que los mortales
acepten sus consejos
¡oh musa!

Este es un homenaje

Un castillo
de arena
pero digamos de cristales

corre pues el balón
y en él se concentran los latidos al ritmo
anhelante de los corazones
Te miras ir trás él
¿Cuánto ha pasado desde entonces?

La conmemoración:
este recuerdo ya esta en el santoral de tu derrota
ahí lloraste
encandilado
tus labios partidos por la sal
y el beso de la brisa

Un campo semántico de aves marinas
extienden sus alas sin tocarse

rueda el balón
van todos
tras sus metros
la distancia
hay más metros en esta bahía
que los pasos que tú has dado

Y de pronto te preguntas
qué tan importante es la coherencia
">

Una nota sobre la charla del sábado

En el ex-convento De izquierda a derecha: Antonio Marts, Jorge Orendain, José Antonio Neri, Karla Sandomingo y Efraín Amador
Analizan el arte de ser escritor
Por Gustavo Aréchiga
Grupo Reforma

Guadalajara, México (9 mayo 2004).- No todos los que asisten a un taller literario en Guadalajara, o los que pueblan las aulas académicas, llegarán a ser prolíficos escritores. La literatura, no obstante, ni es una labor de genios, de la élite intelectual, sino un oficio humano, como el de un burócrata o un panadero.

Estas fueron las reflexiones generales entre Antonio Marts, Jorge Orendáin, Karla Sandomingo y Efraín Amador, quienes asistieron al cierre de actividades del Primer Congreso de Estudiantes de Letras Hispánicas de la UdeG, ayer en el Ex Convento del Carmen.

Tres ejes fueron las líneas que siguió la charla: el análisis de la condición del escritor, en tanto mito o realidad; la situación actual de los talleres literarios en la ciudad, y el vértigo por publicar de los que se inician en las letras.

Orendáin comenzó por definir a los verdaderos aprendices de la literatura: quienes no creen que por el simple hecho de que leen mucho ya saben escribir.

El escritor agregó que la enseñanza de las letras debe romper con limitantes autoimpuestas y que el éxito o fracaso de un taller no se mide por la cantidad de libros publicados, los premios, el sueldo del que lo dirige o la institución que lo cobija.

Marts, director de la editorial Paraíso Perdido, trajo a colación las reflexiones de Ricardo Garibay, las cuales dictan que el escritor debe adoptar dos posturas: la de la soberbia frente al mundo, valorando su creación, y la de la "terrible humildad", cuando trabaja frente a la página -pantalla- en blanco, asumiendo que no sabe nada y que no va a descubrir el hilo negro de nada.

En el Primer Congreso de Estudiantes de Letras Hispánicas participaron ponentes de la Universidad Iberoamericana, la UNAM, la Universidad Autónoma de México, la Autónoma de Aguascalientes y la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla; del ámbito local figuraron Carmen Villoro, Luis Vicente de Aguinaga, Fernando Carlos Vevia, Jorge Souza y Ricardo Yáñez.

sábado, mayo 08, 2004

Paisajes interiores

II

II

Hay movimiento
tu condena es el vacío de la pausa.
Ciudad: radiografía donde calles translúcidas
dejan su huella ósea en los pasos que develan
los transeúntes cada esquina.
¿Qué esperan? Tiempo detenido.
Vértigo en cada luz roja del camino,
un temor al infortunio anunciado cuadra a cuadra.
Autobús:
fibra óptica de asfalto, un nudo,
tu garganta es nudo, cae de la rama más alta
muere
la horizontal y el tiempo
claroscuro
un espejo retrovisor donde el pasado
no alcanza a ser mirado.
El desfile de rostros
es constante.
Una sombra, un vaho, una llama grisacea
en el mercurio:
el espejo razgado, par
tido
en fragmentos.
Los recuerdos son la noche.


Hay movimiento
en el gris de las nubes borrascosas
en el viento que agita la copa de los árboles
en el respirar de la gente que cruza y descruza la avenida.
Una mano invisible te conduce. Una mano borrosa, apenas perceptible.
Asciende la mirada
cada escalón de luz una parte de ti.

Hay movimiento
siempre
en lo estático. Cada
instante
es par
padeo.

Paisajes interiores

I

I

Un abismo.
Tus pasos han guiado hasta el borde
ráfagas de viento: tu cuerpo
una casa a medias levantada.
Tiembla. Se inclina.
Recuerdos se deslizan en una danza incomprensible. Arquean
el velo de su cuerpo
agitan el pabilo de sus manos.
No puedo decir que cada piedra ha sido puesta en su lugar
con intenciones transparentes.
Hay en el aire un parpadeo de luz. A la distancia
un ave, quizás halcón. La caída:
río inexistente
donde navegan las pirañas.
En el abismo no hay frutos minerales.
Acaso un camino trazado por el fuego
que descubre las edades de las rocas,
los restos fósiles de la memoria.
(No es necesario excavar por mucho tiempo).
El viento
empuja,
estoico permaneces: qué mano, que boca hay
tras el viento
—qué mensaje, qué línea de qué libro.
Un árbol caído. El filoso acero recorre su corteza y la desnuda.
Es verdad que estuviste en esas rocas. Las huellas
lo atestiguan.
Ni monumentos, ni memorias.
Tal vez la sombra que pasa sobre ti no es
la sombre de un buitre:
tal vez
no estas muerto.

Mucho ruido y pocas nueces

Días agitados. Días de vendimia y de comprobar el poco interés por la lectura. De plantearnos el reto, en verdad difícil, de invitar a leer a las grandes masas. La gente pasa indiferente frente a los libros y revistas. No todos por supuesto. Hay algunas ventas. No, no se trata del precio. Ni siquera los libros baratos son comprados. Incluso, ni siquiera a la gente que estudia la literatura, la lengua, que se supone sería el público obvio para estos libros, prefiere gastarse su dinero en alcohol. Ahh el alcohol. Elixir. Pretexto. No disculpa. Comprobar lo que anteriores observaciones ya han mostrado. La generación de futuros "literatos" esta verde. Comprobar que los clichés permanecen y que pareciera que es en las facultades de letras y filosofía donde más se arraigan. Hablar de la trova como si fuera el no más allá de la música, que aburrición, la vieja lucha izquierdosa, el apoyo total a Cuba, treinta años de atraso en las mentes de nuestros jóvenes, y no se dan cuenta. La reflexión ha caído en el olvido. Hubo un encuentro de estudiante de letras: lecturas, ponencias, lo que siempre se hace en estos casos. Es sorprendente ver como los niveles de conocimiento y lectura son básicos, una tristeza comprobar que no conocen a los escritores más cercanos, que sus maestros son referencia de todo, que los que se animan a escribir sienten que revolucionan el micromundo de las letras cuando sus textos son predecibles, llenos de fallas y no saben ni siquiera leerlos de manera correcta. He contemplado la estrellitis en su máximo apogeo. Qué han logrado nuestros jóvenes "poetas", nuestros jovenes "cuentistas". Nada y ya se creen con el derecho a recibir los parabienes de un nobel. ¡Ahhh! que hay de las lecciones de humildad. Salvo pocas excepciones nuestra literatura no se esta escribiendo en las aulas, ni siquiera nuestra crítica. Hace falta compromiso. Hace falta tomarse esto en serio. Poque aunque la literatura sea un trabajo lúdico, a fin de cuentas es trabajo. ¿Cuánto más ha de tardar el fruto en madurar?

Todo comienzo es accidente

Un golpe estrepitoso.
Pausa.
El silencio justo después del desastre. La calma falsa. Sobre el asfalto, sobre los autos, vapor, humo, tierra tal vez. El único espectador el semáforo. Rojo, amarillo, verde, rojo. Un auto atravezado a media calle con la parte delantera colapsada. A unos metros el cuerpo de una mujer sobre el pavimento. El otro auto un poco más distante estrellado contra un árbol del ancho camellón. El sonido vuelve. Un ligero ronroneo en los oídos. Una puerta se abre. Del auto desciende una joven. Corre repitiendo con desesperación el nombre de otra chica. Corre hasta quedar junto al cuerpo inerte que agita. El eco de su voz recorre la cuadra entera. La noche. La cercana madrugada son únicos testigos. El semáforo indiferente. Del otro auto nadie sale. Por ambas avenidas se acercan nuevos autos. Sangre. En el cielo una enorme luna blanca resplandece. Algunos autos se han detenido. Sonido de puertas que se abren y cierra. Pasos. Alguien se acerca. Hay dos personas en el interior. El vidrio estrellado. Un hombre y una mujer. Jóvenes. Rojo, amarillo, verde. rojo. «Levántate», «levántate». Algunos tratan de alejar a la muchacha. Alguien marca desde un celular. «Están muertos». Sobre ellos las estrellas permanecen indiferentes.

jueves, mayo 06, 2004

Cineforo

Pudo ser el tiempo detenido. El súbito despertar hacia la nada. La posibilidad de recordar después esa noche, su sonrisa y los ojos clavados en el cielo despejado de febrero. Todo quedó en esbozos. Dentro de la sala, ahora iluminada por tenúes luces, un inquietante silencio. Los pocos espectadores se fueron levantando lentamente, como quién recien despierta, como quien va dejando tras de si el fantasma del sueño. Pero no había sido un sueño. Aunque cuando voltea una vez más para verla, no la encuentra. Una punzada en la boca del estómago. Mover la cabeza hacia todos los lados posibles. No estaba. «En que momento se ha ido». Se levanta con prisa, tratar de alcanzarla en el vestíbulo. No encuetra a nadie salvo al último par de espectadores que toman la escalera hacia el exterior, y la dependienta de la dulcería. Qué hacer. Tal vez se encontraría en el baño. Se encaminó a la dulcería. «No sabes si alguien ha entradado al baño». La dependienta lo mira de manera extraña. «Busco a una amiga» dice, para justificarse. Para que los ojos acusadores de ella lo miren con nuevo espíritu. Sólo mueve la cabeza en forma negativa. Tiene que confiar en ella. La punzada es persistente. Toma la escalera hacía la salida. Se despide del tipo que custodia la puerta. Un pasillo más o menos largo y más escaleras. Casi corre. Los últimos días de febrero. La noche es cálida, casi asfixiante. Izquierda o derecha. La vida siempe es elección. La banqueta vacía. Son casi las diez de la noche de un domingo. Se decide por la avenida principal. No hay muchos autos. En la esquina ha cruzado a pesar de que la luz roja del semáforo que buscaba indiferente detener su paso. La banqueta en la avenida es ancha. Una ráfaga de viento levanta hojas secas a su paso. Se va perdiendo en la oscuridad de la noche. Se va perdiendo. Se va perdiendo.

Libros leídos en abril

Abri / 836/ Jeff Noon / Vurt •••••
Abril / 837 / Tryno Maldonado / Temas y variaciones ••••
Abril / 838 / Carlos Batista / Los muertos de mi casa ••
Abril / 839 / Rafael Medina / Los evangelios de la furia •••

Libros leídos en marzo

Marzo / 823 / J. K. Rowling / Harry Potter y la orden del Fénix •••••
Marzo / 824 / Norman Mailer / El Evangelio según el Hijo ••••
Marzo / 825 / Eduardo Mariño/ La vida profana de Evaristo Jiménez •••
Marzo / 826 / Antonio Tabuchi / El ángel negro ••••
Marzo / 827 / Alda Merini / La Tierra Santa ••••
Marzo / 828 / Eduardo Mariño / Cacería •••
Marzo / 829 / Vladimir Maiakovski / La nube en pantalones ••••
Marzo / 830 / Leonard Cottrell / El toro de minos ••••
Marzo / 831 / Jeremías Marquines / El ojo es una alcándara de luz en los espejos •••
Marzo / 832 / Antonio Gamoneda / Libro del frío ••••
Marzo / 833 / Ricardo Garibay / Breve Antología ••••
Marzo / 834 / Gabriel Magaña / Jasaduras •••
Marzo / 835 / Cecilia Eudave / Registro de imposibles ••••

martes, mayo 04, 2004

Hey, ya me pueden dejar comentario, además del Tag

Saludos, nada más con la novedad de que ya me pueden dejar comentario. Con sólo dar un click en donde dice "Comment" y listo. Gracias y hasta pronto

Citando a Carlos Adolfo Gutiérrez Vidal *****

"CARLITOS DESEMPLEADO

Mi vida laboral siempre ha sido una serie de pequeñas desgracias y maravillas. Hasta hace seis años jamás me vi en la necesidad de trabajar para vivir. Más que necesidad se trató de una decisión tomada con descuido; estaba en una fiesta en Tijuana y un amigo tuvo a bien decirme que yo debería venir a vivir a esta ciudad. En mayo del 98 empaqué mis cosas y me mudé. Me divertí de lo lindo hasta que mis ahorros se agotaron y me vi en la penosa necesidad de conseguir empleo.

Fue un amigo quien me invitó a impartir dos clases. Sociología de la cultura y Semiótica. Podría decir que desde entonces la vida académica se convirtió en mi vocación, pero no. Prefiero ver todo el asunto de investigar y dar clases como algo que disfruto más que nada. De cuando en cuando me he tomado mis pausas para dedicarme a lo que algunos académicos llaman "ejercer". Esas temporadas han sido cortas, pero si hay algo que me han dejado claro, es que jamás debo hacer algo que no quiero.

Estar en el lugar incorrecto, con la gente incorrecta y haciendo cosas que uno puede llegar a detestar, no suele resultar sano. Así que vale más optar por los propios intereses y decir adiós a todo aquello. La aventura más reciente fue una oficina de gobierno. No es que el trabajo dentro de la administración pública me resultara del todo ajeno, pero sin duda este ha sido el trabajo más aburrido que he tenido. Fui educado para caer mal, no para recibir órdenes y maquilar libros. Ni modo.

Así que hace una semana decidí apelar al magnífico poder que da la seguridad material, y renuncié de una vez por todas a aquello que tenía mi vida hecha un desastre. Ahora mi tiempo vuelve a ser mío y puedo dedicarlo a lo que más me place. El dinero es lo de menos. Tener que pagar la renta no justifica la insatisfacción.

Dice un amigo que en los últimos años me he vuelto adicto a los cambios repentinos. Que ir de una ciudad a otra, de un empleo a otro se ha vuelto mi pasatiempo favorito. Pero no, más bien me he vuelto adicto al azar, al vertigo que produce la incógnita constante. Otra amiga dice que lo que me pasa le pasa a todo el mundo, que estamos en la edad en la que estamos buscando un "where", un "who" y un "how to settle down"; hasta cierto punto tiene razón.

El "where" es lo de menos siempre y cuando el "who" (que es uno mismo) sepa que hace lo correcto. El "how" está determinado por una serie de factores sobre los que uno no necesariamente tiene algún tipo de influencia. Esta semana, platicando con mi ahora ex jefa (amiga de hace años), me encontré frente a una pregunta casi casi sofista: "¿qué vas a hacer cuando se muera tu mamá?, vas a estar solo..." Menuda pregunta viniendo de alguien a quien le dejaste la renuncia sobre el escritorio el lunes. Extraña, sin duda, sobre todo cuando la formula una mujer que en su momento fue una madre adolescente, es divorciada, con dos hijos, y vive con un tipo varios años menor que ella.

¿Que qué voy a hacer ahora? Por lo pronto hacer lo mismo que hacía antes de que me invitaran a aceptar este "super empleo": leer, escribir, ir a fiestas y dar un par de clases. ¿Que qué voy a hacer cuando mis papás se mueran? Llorar, seguramente; sentirme desamparado por ver cumplido mi gran temor de la infancia, pero también heredar una cantidad que me permita un fresh start. ¿Que si le tengo miedo a morir solo? Peut etre, pero la soledad no es algo que uno pueda decidir, evitar o contrarrestar sólo por miedo.

Por lo pronto este fin de semana he celebrado en privado con sendas botellas de champaña, porque todo en la vida es según el cristal con que se mira, y porque en el mar (y con burbujas) la vida es más sabrosa."

--------------------------------- Pueden visitar su blog --------->

Radio Universidad, 30 aniversario

Para Brita Urias, a quien amo con todas mis ondas hertzinas (o martsianas)

La palabra primordial

Escritura: voz: puente en espera de ser transitado. Aquí está la palabra, el mensaje: “La eternidad de lo efímero”.


Hay sonido. El vacío se rasga. La nada. Big Bang: la melodía más estridente jamás escuchada. Una trompeta. Un galope que se extiende infinito por el cosmos. Expandirse. Polvo. Loop: el paso del tiempo. De nuevo la trompeta. La estrella más pequeña devora toda luz a su paso. Nada queda. Todo queda. En un instante se concentra el universo. Una vez más, hay sonido…

Alguien abre la puerta que son mil puertas. El mundo habla: es el rotar del planeta sobre su eje, el chisporroteo magnético y sus auroras, el diapasón atravesado en el cielo. Muevo mi mano. Un segundo antes el mundo era otro. Y cada vez que late mi corazón hay una nueva nota en los tímpanos de todos.

Es la hora nocturna, o el mediodía o la mañana. En cualquier caso un espacio en el tiempo, una habitación, tres metros cuadrados que se abren infinitos. La palabra primordial es apenas un suspiro.

Ahora me escucho. El sonido es un espejo. Por la habitación serpentean los acordes que escapan de un aparato de sonido. Se van filtrando a través de mi piel, tatuajes invisibles, me alimentan. Están dentro de mí. No hablo. Pienso: el silencio es mi voz verdadera.

Se apaga el interruptor, pero la radio no calla.

lunes, mayo 03, 2004

Rompen relaciones...

Agencias de prensa internacionales han informado de la abrupta decisión tomado por el H. Congreso de _________________ para retirar a su embajador y a toda la delegación diplomática que lo acompaña de __________________. Los choques diplomáticos de los últimos meses han propiciado esta decisión que parece sorpresiva pero que si se analizan los hechos tardó demasiado tiempo en darse. De todos es sabido que en el país de ____________________ reina una atmósfera cambiante todo el tiempo, propicia de pronto, después totalmente contraria. Los críticos especializados arguyen que se trata de una civilización que no ha alcanzado su madurez y por ello esas reacciones sociales incomprensibles para la mayoría. Debido a sus conflictos internos y divisiones de poder, han sido ya varias las naciones que han propuesto a las naciones unidas enviar tropas para controlar la situación. Sin embargo ninguna medida ha sido tomada. El informe es escueto. Pero esta mañana el antigüo edificio de la embajada lucía desolado. La presidenta de _________________ ha dicho que es una lástima que dos naciones hermanas y con tantas raíces comunes tengan que terminar así. Culpó del desastre diplomático a __________________ presidente actual de _____________________ de no comprender su política exterior. Dijo así mismo que aunque el pleito es casi personal con ________________ los pobladores de _______________ seguirán siendo hermanos. El presidente de _________________ ha respondido que no cree ya ninguna palabra salida de la boca de _____________, pues es una persona falsa e intrigosa que no busca otra cosa salvo generar conflictos.
Mientras tanto los países vecinos miran expectantes cualquier indicio de movimiento de tropas. Lo cierto es que en el concierto de las naciones hay una leve preocupación por las medidas inmediatas que puedan ser tomadas. Se temen actos de barbarie, la presidenta de ________________________ es impulsiva y rencorosa, a pesar de que alguna vez tuvo en ________________________________ a su mejor aliado.
En fin, se espera que para mañana...